4 consejos y trucos para mantener a punto el aire acondicionado
Llega el verano y con él un calor insoportable en el coche. Subirse a él, después de haber estado al sol durante un tiempo prolongado, puede suponer entrar en ambientes de hasta 69º. Además, conducir sin aire acondicionado en verano puede llegar a simular sensaciones en la conducción a las de superar la tasa de alcoholemia. Así que, imagínate que aparece una avería en el aire acondicionado.
Posibles fallos
Los establecimientos de reparación de vehículos notan en estos tiempos el aumento de afluencia de casos relativos al aire acondicionado. ¿Cuáles? Uno de los principales radica en el aire ínfimo que expulsan los conductos. Del mismo modo, escuchar ruidos sospechosos al conectar el aire acondicionado puede ser también motivo de reparación. Se deberá comprobar que no existan problemas en el sistema de refrigeración u obstrucción de los filtros.
También puede ser síntoma de posible avería la concentración de vaho en los cristales. Todo y pese a tener el aire acondicionado encendido. Esto puede significar una insuficiente carga de gas, lo que supondría en torno a 35€ su recargo. Finalmente, encontrarse malos olores podría significar hongos o moho en los filtros, por lo que se deberían cambiar.
Consejos de mantenimiento
Todos los años o cada 15.000 kilómetros aproximadamente se recomienda que se cambien los filtros. Este tiempo se reduciría en caso de que la circulación por pistas de tierra sea habitual. También se deberá comprobar el nivel del líquido refrigerante. Así como limpiar el radiador es otra sencilla acción que podría evitar el calor intenso. Del mismo modo, cada dos años se recomienda una recarga del gas de aire acondicionado en el taller
¿Cuál es la temperatura ideal para circular?
Cuando vayamos a circular en verano, y para preservar el buen funcionamiento del aire acondicionado, se recomiendan varias acciones. En primer lugar, comenzar a circular los primeros minutos con las ventanillas bajadas cuando el coche haya estado al sol. Esto aliviará la salida de aire caliente de los conductos, disminuyendo su carga de trabajo para disminuir la temperatura del interior. Una temperatura que se recomienda sea de 22 grados, puesto que por debajo el consumo es mucho más elevado.
